El ultrasonido, también conocido como ecografía, es una de las herramientas de diagnóstico más importantes y usada con más frecuencia. Descubre a continuación un poco más sobre el ultrasonido abdominal y en qué casos deberíamos realizarlo.
A nivel abdominal existen muchas estructuras y órganos, que el médico puede indicar estudiar en caso de que nos provoquen molestias o dolor. El ultrasonido abdominal es un estudio de imagen usado con frecuencia que sirve para diagnosticar, descartar y hasta prevenir enfermedades en órganos como hígado, riñones y páncreas, entre otros.
Es importante que sepamos que este es un procedimiento indoloro, sin efectos secundarios y que no utiliza ningún tipo de radiación, por lo cual es 100% seguro, por lo que no debes temer el procedimiento.
¿Por qué se indica un ultrasonido abdominal y cuándo debo realizarlo?
El ultrasonido abdominal debe ser realizado cuando tu médico lo indique. Normalmente tu médico lo pedirá para diagnosticar o descartar alguna enfermedad.
Algunos de los síntomas más comunes por los que un médico puede pedir este estudio son el dolor abdominal, fiebre, pérdida de peso, sospecha tumoración abdominal, sospecha de litiasis (piedras o cálculos) en vesícula biliar o riñones y problemas renales asociados a diabetes, entre otros.
Otros órganos por los cuales se podría solicitar este estudio serían:
- Riñones
- Hígado
- Estómago
- Vesícula biliar
- Páncreas
- Intestinos
- Vasos sanguíneos abdominales
También pueden realizarse estos estudios en caso de que el paciente esté por someterse a una cirugía.
¿Qué enfermedades detecta un ultrasonido abdominal?
El ultrasonido abdominal puede ayudar a detectar muchas enfermedades, por ejemplo:
- Inflamación o enfermedad hepática.
- Obstrucciones en la vesícula biliar.
- Cálculos, quistes o tumoraciones.
- Inflamación del páncreas o de su conducto.
- Infecciones granulomatosas en el bazo.
- Aneurisma de la aorta abdominal.
- También sirve para realizar biopsias guiadas por imagen.
Finalmente, el médico es quien sabrá qué enfermedad diagnosticar o detectar de acuerdo con la información que hayas proporcionado sobre tus síntomas, tu historia médica y un examen clínico previo.
¿En qué consiste y cómo se hace el ultrasonido abdominal?
El ultrasonido abdominal se realiza mediante un equipo médico que consta de una computadora, un monitor y un transductor. El transductor va conectado a una sonda, la cual a través del gel va a transmitir ondas sonoras de alta frecuencia inaudibles hacia el cuerpo. Dicha sonda va a recoger los sonidos que rebotan (como un eco). La computadora recopila esas ondas para crear una imagen de cada uno de los órganos abdominales que se desean estudiar, la cual se proyecta en el monitor, capturando imágenes estáticas o videos en tiempo real.
Para comenzar el examen, se te pedirá que te recuestes boca arriba en la camilla o mesa de examen y descubras tu abdomen. Después se te colocará un gel transductor para poder transmitir las imágenes. Dependiendo del órgano que se vaya a estudiar, se te pedirá que te muevas en la camilla a la derecha o izquierda.
Solo vas a sentir una ligera presión en el abdomen que ejercerá el médico a través del transductor para observar bien los órganos. La mayor incomodidad puede ser la temperatura fría del gel, pero por lo general resulta un estudio totalmente indoloro.
El estudio dura entre 30 y 40 minutos. Al finalizar, se te retirará el gel con una toalla de papel. El gel no tiene coloración ni olor y no mancha.
Cuidados previos y posteriores del ultrasonido abdominal
Para realizarte un ultrasonido abdominal es recomendado asistir con prendas cómodas y holgadas para facilitar el estudio. Es posible que se te solicite usar una bata desechable durante el procedimiento, por lo que deberás quitarte las prendas del torso.
Normalmente se indica un ayuno de al menos 8 horas para valorar los órganos de manera adecuada, se puede tomar agua y si se consume algún tipo de medicamentos, estos no se deben suspender. Si la persona padece una enfermedad renal con restricción de la ingesta de agua, no debe beber más de la permitida.
Recuerda seguir las indicaciones de tu médico para prepararte adecuadamente, y confirmar con el laboratorio o clínica donde se realizará el estudio cuáles son los cuidados previos.
Dependiendo del tipo de ultrasonido o el órgano de interés del médico, pueden existir distintos cuidados previos:
- Ultrasonido abdominal con énfasis en hígado, vesícula biliar, bazo y páncreas. Se puede solicitar que el paciente consuma alimentos libres de grasas y evite la ingesta de alimentos (ayunar) durante 8 horas como mínimo.
- Ultrasonido abdominal con énfasis renal. Se puede solicitar que el paciente beba aproximadamente 8 vasos de agua una hora antes de que se realice el estudio para llenar la vejiga. También puede que se le pida que ayune mínimo durante 8 horas.
- Ultrasonido abdominal con énfasis en la aorta abdominal. También se puede recomendar el ayuno de aproximadamente 8 horas.
Al finalizar el estudio no se necesitan cuidados posteriores. Se puede volver a comer o tomar agua inmediatamente.
¿Cuántas veces al año se puede realizar un ultrasonido abdominal?
El ultrasonido o ecografía abdominal, al no tener contraindicaciones y ser muy seguro (ya que es libre de radiación), se puede realizar las veces que sean necesarias sin correr peligro. Además, cualquier persona se lo puede realizar.
Sin embargo, no olvides seguir las indicaciones de los especialistas, pues solamente ellos sabrán interpretar los estudios adecuadamente y seguir un rumbo de tratamiento y diagnóstico.
¿Qué estudios complementarios se pueden realizar?
Entre los estudios complementarios se pueden indicar exámenes sanguíneos y biopsias para confirmar los resultados por ultrasonido. Por ejemplo, en caso de una hepatitis (inflamación en el hígado) se pueden realizar exámenes sanguíneos que muestran la presencia de los anticuerpos virales. También se puede realizar una biopsia para verificar si hay daño hepático.
Todas estas indicaciones sólo las decidirá tu médico.
Cómo recibiré los resultados de mi estudio?
Las imágenes son examinadas e interpretadas por un médico radiólogo o un médico que esté capacitado para supervisar e interpretar estos estudios. Ellos proporcionarán un informe firmado dirigido al médico que ordenó el examen.
Los resultados se reciben normalmente en un plazo de entre uno y tres días. Recuerda que independientemente de lo que se indique en el reporte, es tu médico quien te indicará qué significa en tu caso específico, o si necesitas estudios adicionales.
Una vez que el médico que te solicitó el estudio reciba los resultados que le compartas, puedes solicitar que te explique qué fue lo que se encontró en el examen y cuáles son los pasos a seguir para un tratamiento.
Referencias
- Abdominal Ultrasound. Mayo Clinic.
- Ultrasonido abdominal completo. Radiología DX.
- Ecografía en cirugía general. Revista Colombiana de Cirugía.